Finalmente se consumaron nuestros peores temores. El 6 de septiembre, en la primera reunión del período de consultas del ERE de Fidelización Inbound, Outbound, Retenciones y Back Office, Transcom ha anunciado que la medida propuesta afecta nada menos que a 200 personas, 200 vidas y familias que quieren truncar (197 trabajadores/as de operaciones y 3 de estructura). Naturalmente, este atrevimiento de Transcom no ha surgido de la nada: el año pasado más de 250 despidos en Superlínea avalados por la mayoría sindical (no por CGT) ¿y el año que viene? De hecho el abogado de la empresa está queriendo calcar literalmente el formato del ERE del año pasado. Tan mal no les fue, ¿no?
En la reunión Transcom nos ha entregado un voluminoso dosier convenientemente preparado por una consultoría de confianza para justificar esta sangría a nuestro juicio absolutamente injustificable salvo por una causa: la codicia sin límites de unos buitres que nos tratan como objetos de usar y tirar. Analizaremos pormenorizadamente en colaboración con nuestros servicios jurídicos esas cuentas y ese informe. De momento CGT ya ha planteado que el proceso comienza con trampa, ya que Transcom alega el final de unas campañas que se siguen prestando en las empresas Arvato y Sitel Sevilla.
Mientras tanto CGT ya está meditando un posible calendario de movilizaciones, que trataremos de consensuar con otras organizaciones sindicales presentes en la mesa de negociación, incluso con quienes solo piden café y pastas para pasar agradablemente las reuniones del ERE, que anunciaremos próximamente y no solo pretenden involucrar a Transcom sino también a su cliente Orange.
La próxima reunión tendrá lugar el día 13 de septiembre y ya veremos si Transcom escucha nuestras propuestas para detener esta verdadera tropelía, porque si no la detenemos mucho nos tememos el año que viene tener que publicar un comunicado similar a este.