Ayer, día 20 de junio de 2017, la empresa nos comunicó la apertura de otro proceso de modificación sustancial de las condiciones de trabajo para lxs trabajadorxs de Movistar Gran Público.
Vuelven a la carga en verano, a ver si a algunxs nos pilla despistadxs, amodorradxs, hastiadxs o mejor: lejos. Os sonará: modificar jornadas, horarios y sistemas de libranzas de, aproximadamente, 1000 trabajadorxs, distribuidos en 11 centros de trabajo distintos: Barcelona, Bilbao, Córdoba, A Coruña, Jaén, León, Lleida, Madrid, Sevilla, Toledo y Valencia. No obstante, no disponemos, en estos momentos, de datos detallados por centro.
Por este motivo, Atento convoca a los sindicatos a una reunión para iniciar un proceso de negociación. La reunión tendrá lugar el próximo día 29 de junio en Madrid y la negociación no puede tener una duración superior a los 15 días.
Desde la CGT, una vez más, vamos a luchar para que no se vean afectadas nuestras condiciones actuales de trabajo. Esta MSCT es la segunda en menos de un año para lxs trabajadorxs de Gran Público y, tras la supuesta petición de Telefónica de adaptar el horario de atención a «nuevas necesidades», quieren hacernos creer que no hay alternativa posible.
Sin embargo, en la primera MSCT ya demostramos en la mesa de negociación, en los centros de trabajo y en los tribunales, que esto no era así. Y conseguimos anular la medida. Ahora, de nuevo, no podemos asumir, sin más, cambios que -otra vez- parten nuestras vidas y afectan a nuestros bolsillos por una imposición injusta y miserable.
El trabajo existe, las llamadas de los clientes se siguen realizando en estos horarios, digan lo que digan, y lxs trabajadorxs de Gran Público estamos para atender esas llamadas. Hay trabajo. Lo sabemos lxs trabajadorxs, lo sabe Telefónica, lo sabe Atento, lo saben lxs clientes. Veremos lo que nos espera, pero tengamos muy presente que lo que hace meses era un clamor sigue siendo una realidad: nuestras vidas son más importantes que los beneficios de estos mangantes.
Seguiremos informando puntualmente de este nuevo ataque a la conciliación y organización de nuestras vidas.