Desde que CGT constituyó la Sección Sindical en CATSA, nuestra actividad para alcanzar mejoras para tod@s cuantos conformamos la plantilla no ha cesado y la empresa para contrarrestarla ha usado la represión y todo tipo de maniobras.
Las últimas actuaciones caciquiles han sido encerrar a los miembros de la sección sindical “en un zulo” al margen de la plantilla o sancionar al compañero José Manuel con 45 días de suspensión de empleo y sueldo, de forma absolutamente arbitraria y unilateral.
Estas actuaciones empresariales por parte de los que se creen dueños del cortijo no van a quedar impunes y no van a poder evitar que CGT concurra por primera vez a unas elecciones sindicales en el centro de Málaga, para ello, tanto el Sindicato de Transportes y Comunicaciones de CGT como la Federación Provincial nos van a blindar su apoyo incondicional dando inicio a diferentes actuaciones contra el terror, la marginación, la soberbia y el fascismo, de las cuales se dará puntual información.
El martes, 8 de mayo, se constituyó la mesa electoral y por más que les pese, ahí estuvo la CGT.