Las triquiñuelas de las empresas del Contact Center para hacer recaer todos sus costes laborales y salariales en las sufridas espaldas de sus trabajadores/as no tienen fin. La última “genialidad” en este sentido viene de la mano de la empresa Digitex, que este año implantó una herramienta informática llamada Meta4, más destinada aparentemente a “castigar” el disfrute de permisos y ausencias retribuidas y no retribuidas legalmente que a agilizar las gestiones administrativas relacionadas con dichos permisos y ausencias. Y es que la dichosa aplicación se colgaba más que un orangután en las selvas de Borneo y daba un sinfín de quebraderos de cabeza a quienes la usaban, que además empleaban un tiempo medio de entre 5 y 10 minutos en introducir los datos necesarios para justificar sus ausencias, previo escaneo de los documentos correspondientes. Para colmo y en vista de que obligar a los trabajadores/as al uso de sus descansos y pausas visuales podía resultar un atentado demasiado flagrante contra los derechos de la plantilla, Digitex tuvo la no menos genial ocurrencia de imponer su utilización en el tiempo libre y personal de los trabajadores/as. Vamos, ni al que asó la manteca…
Semejante tropelía acabó, ante la contumacia de Digitex, en una demanda judicial de conflicto colectivo ante la Audiencia Nacional promovida por CGT y USO, a la que posteriormente se adhirió el resto de la parte social. En vísperas del juicio y en vistas de la que le podía caer encima, Digitex alcanzó un acuerdo con casi toda la parte social, incluida CGT, para permitir la entrega de los justificantes de los permisos a los coordinadores/as de las campañas en caso de imposibilidad o dificultad en el uso de la herramienta Meta4, pero sin ceder en su pretensión de que la utilización de esta se hiciera fuera del tiempo de trabajo.
Pues bien, la Audiencia Nacional, en sentencia del 19 de septiembre de 2016, ha puesto las cosas en su sitio obligando a Digitex a permitir el uso de Meta4 dentro de la jornada laboral considerando el tiempo empleado en su uso como tiempo efectivo de trabajo, partiendo del principio de que si la empresa quiere ahorrarse costes administrativos debe asumir alguna contrapartida en forma de tiempo de trabajo.
Lamentablemente, este éxito que debería ser unánimemente celebrado por toda la parte social parece que escuece un poquito a un sindicato, llamado UGT, que quiere asumir un plus de protagonismo. Además de tratar de apropiarse de una demanda a la que no hizo más que adherirse, arroja sombras de duda sobre la justicia de esta sentencia insinuando que podría ser revocada por el Tribunal Supremo, y casi hasta dando ideas a Digitex para recurrirla. No desperdicia tampoco la oportunidad de colgarse la medalla del acuerdo previo invocándolo como una genial maniobra propia para protegerse de esa hipotética sentencia desfavorable. En fin, el oportunismo propio de ciertas aves carroñeras que sobrevuelan nuestra geografía, al que por desgracia ya estamos demasiado acostumbrados/as…