El pasado día 2 de junio se cerró el periodo de consultas de las MSCT colectivas en la empresa Extel por el "supuesto y ya conocido" cambio de horario de atención telefónica de Movistar en el 1004 y que ya pasamos en Atento. En este caso se cerró con acuerdo por parte de CCOO y UGT. En contra CGT, CIG y USO.
El destrozo afecta a un total de 857 personas distribuidxs en las plataforma de Madrid, Coruña, Zaragoza, Barcelona y Málaga. Trabajadorxs con variedad de situaciones laborables: Jornadas completas que trabajan sábados/fines de semana y los que no, jornadas parciales que trabajan sábados/fines de semana y los que no, compañerxs que solo trabajan fines de semana que también están afectadxs.
A CCOO y UGT no les ha temblado la mano para avalar la MSCT de 857 personas, aunque implique que vayan a trabajar el doble de fines de semana (de 13 a 26); o qe quienes no trabajen el doble de fines de semana (13) no pueden librar dos días consecutivos entre semana como castigo, que quienes solo trabajan sábados ahora vayan a trabajar también los domingos, que permitan la pérdida salarial (reducir horas) como moneda de cambio oara poder conciliar … Sin olvidarnos de las personas que pierden los pluses de nocturnidad y transportes y las trabajadoras con Guarda Legal.
El impacto de la fotografía anterior es consecuencia del grado de precariedad que venimos sufriendo en el sector cuando a materia de conciliación, pérdida salarial y pérdida de derechos laborables. parece que todo vale para los firmantes del Convenio de la INDIGNIDAD en el Telemarketing. En EXTEL, puede llevar a cabo la barbarie aunque no exista acuerdo con la Representación Legal de lxs Trabajadorxs una vez firmado el periodo de consultas. La firma de CCOO-UGT no solo avala las causas, sino que cierra las puertas a la denuncia colectiva por parte de los sindicatos no firmantes. Esta forma, teniendo dos sentencias en contra de la Audiencia Nacional (una en Atento y la otra en Konecta) por el mismo proceso, es una traición en toda regla.
Los sindicatos que dicen llamarse de clase reproduce el mismo discurso cerrado de la empresa: susto o muerte. Pues queda claro que ni susto ni muerte, que no damos por bueno "lo menos malo" ni nos creemos el aforismo de "es lo que hay", porque la lucha de todxs juntxs nos ha enseñado que sirve, porque sabemos que es nuestra mejor herramienta para defender y avanzar en derechos ante las políticas del miedo de la empresa y sus cómplices.
Desde CGT seguiremos proponiendo en las empresas del sector y contra estos ataques de nuestros derechos actitud de lucha, porque creemos que ese es el camino que nos ha llevado a empoderarnos frente a conflictos que lo que pretendían era condenarnos a más precariedad.